Escuchando a Perú

Se termina octubre, tan solo dos meses nos separan de un nuevo año. Y, como ya saben, en esta ocasión al igual que (casi) todos los meses traemos una nueva edición de Planeta Sonoro, donde dedicamos un espacio a la música que nos gusta así no entendamos, de esta manera, dibujaremos de a poco un mapa que nos permitirá viajar con solo darle click al play. Bienvenidos.

Hoy volveremos a latinoamérica en compañía de @vas_y_vienes desde Perú, a quien conocí gracias a las redes sociales y a quien pueden leer el el blog El Amarillo !Viva la tecnología porque nos permite compartir música con personas de cualquier parte del mundo! Gracias a él por su participación.

Pueden seguir nuestras playlists de Spotify y Youtube donde encontraran compiladas todas las agrupaciones :)

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@vas_y_vienes escucha: 

1. LOS YORKS (CON MELCOCHITA) – EL LOCO

¿Han escuchado esa teoría sobre que el punk lo inventaron Los Saicos en Perú? Prefiero verlo como una anécdota antes que una realidad ,debido a que hay un contexto ajeno al origen del género. Igual, esto no quita que bandas que han tenido momentos de gloria como los Black Lips han nombrado a Los Saicos como uno de sus referentes musicales, pero a veces, con algo de ligereza, imagino que también pudieron mencionar al cómico Melcochita (Pablo Villanueva) cuando “colaboró” con Los Yorks a finales de los años 60.

Esta es una anécdota dentro del rock peruano, cuando Los Yorks hicieron un cambio de disquera en medio de su mayor auge, de MAG a El Virrey, los primeros intentaron seguir capitalizando con la popularidad de la banda al lanzar abruptamente un nuevo vinilo. Lo único que hicieron fue agregar vocales a pistas instrumentales que la banda dejó como descartes. El elegido para ser la voz de este disco apócrifo fue el ya mencionado Melcochita, quien no duda en darle un carácter salvaje a su breve e ilegal participación en la historia de la banda. De este modo nacen temas con nombres algo simples pero llamativos como “El Loco”, “El Preso” o “El Psicodélico”, todos ellos cargados de un espíritu desconcertante. Alaridos y disfuerzos líricos dan pie a momentos salvajes que van contra la norma en el pop y rock de la época.

Actualmente el legado de Los Yorks es innegable, y mucho más el de Melcochita, quien como sonero o comediante ha logrado un lugar importante en la cultura popular peruana. Sobre su etapa de rockero ya no se habla mucho, dependiendo cómo se le mire puede ser un mal o buen chiste, eso queda en cada uno. Como ya dije, de haber decidido pulir sus habilidades quizás hasta inventaba el punk.

2. CHACALÓN Y LA NUEVA CREMA – LA PAZ Y LA DICHA

Quien alguna vez ha oído alguna canción de Chacalón (nacido Lorenzo Palacios) seguramente conoce la frase “Cuando Chacalón canta, los cerros bajan”, un claro ejemplo de la popularidad del cantante en relación a los sectores marginados de una Lima en constante crecimiento demográfico. Hablamos de los años 80, la capital peruana crece debido a las migraciones propias de un poder gubernamental siempre centralizado. La Lima urbana creció hacia los cerros, donde a lo que esto pequeño resumen le compete, la mezcla de realidades generó una fusión entre la cumbia y huayno, dando por resultado un nuevo estilo de cumbia costeña.

¡La nueva Lima tenía su propio género musical!

La tristeza y vivencias del migrante marginado encontraron su voz en la música de Chacalón y otros exponentes de esta nueva música.  La Paz y la Dicha es uno de los mejores temas introductorios para quien busca conocer más del denominado “chinito de los andes”. Ello al sintetizar bien algunos de los componentes más característicos del género: de los ritmos bailables a la lírica de noble emprendimiento, pasando por la protagónica presencia de la guitarra eléctrica.  La canción toma por momentos cierta reminiscencias a enseñanzas propias de un texto bíblico, sobre todo en los coros, y, seguro sin ser coincidencia, como si se tratara de una figura que conoce los límites invisibles de su legado Chacalón dice “El día que yo me muera al escuchar esta linda melodía tus ojos, tus ojos, se llenaran de lágrimas, tu corazón se estremecerá, te lo dice Chacalón y la Nueva Crema”. Vaya que tuvo razón.

3. ADA Y LA NUEVA PASIÓN – LLORANDO TU PARTIDA

Saltando algunos hitos de la música popular peruana, llegamos al fin de los años 90, donde se generó el boom de la denominada tecnocumbia. El mismo nombre se utilizó en otras partes del continente, pero la tecnocumbia peruana terminó siendo una versión modernizada de la cumbia local, agregándole teclados y sintetizadores a la ya mencionada fusión entre ritmos tropicales y andinos. Pese a ello la principal característica que me gusta atribuirle es la exposición mediática que alcanzó, llegando a los horarios estelares de la televisión y cada casa que tenga una fiesta un sábado por la noche. Vale decir que las clases dominantes la disfrutaban con cierto exotismo u otorgándole categoría de placer culposo, pero no se puede negar su relevancia, siendo el género musical que definió el cambio de milenio.

El gran hit de Ada y la Nueva Pasión fue la adictiva "Te Arrepentirás" pero solo quiero hacer referencia a ella como contraparte a "Llorando Tu Partida" pues es esta la que encierra perfectamente uno de mis tópicos favoritos en la música moderna: el llorar en la pista de baile. Mientras "Te Arrepentirás" simboliza el empoderamiento propia de quien menos sufre tras una ruptura amorosa “Llorando Tu Partida”, como su nombre indica, simboliza los instantes más dolidos. Basta unos pocos segundos de la introducción instrumental para saber lo que se viene, una catarsis emocional o algo más de tres minutos donde el despecho se encuentra validado, la vulnerabilidad no resta sensualidad y la composición evoca cierta emotividad, tópicos presentes en cada género musical que ha tenido cierta popularidad en las últimas décadas. El que no lo crea que recuerde a sus amigos indie llorando en la disco cuando escuchan temas como Dancing On My Own de Robyn. No nos hagamos los locos.

4. TURBOPÓTAMOS – ELISABEL

El primer disco de los Turbopótamos debe ser uno de los acontecimientos más relevantes dentro de la todavía prematura historia del rock peruano del siglo XXI. Como quien sabe que lo que posee es especial el cuarteto nombró a lo suyo como “skabilly”, mezcla de ska y rockabilly —oh, obviedad—, siendo esta la parte superficial que da paso a canciones llenas de energía, soltura y creatividad atípicas a su época.  Luego de unos años llegaría No Love, segunda producción de estudio de la banda, donde, como toda banda comprometida con su crecimiento, buscarían domar su sonido y a la par ampliar influencias. 

Elisabel, a gusto personal, es de las canciones que mejor logran el cometido de llevar el sonido de los Turbopótamos a un terreno distinto pero pese a ello no necesariamente a uno que suene moderno. Basándose rítmicamente en la versión que los Rolling Stones hicieron de Susie Q, la banda entrega una apropiación de la clásica canción de amor no correspondido existente desde épocas inmemoriables. De haber querido sonar a rock o pop clásico esto es lo más cercano que los Turbopótamos pudieron ofrecer y aún con ello el resultado siguió estando un paso adelante a muchas de las bandas contemporáneas suyas en el 2007.

Ahora, luego del paso de por lo menos un par de eternidades, la banda ha lanzado un nuevo tema, la inmediata Terremoto, especie de reggaetón rock el cual ha desencajado a más de uno de sus fanáticos más conservadores. Conociendo la versatilidad de Turbopótamos es difícil definir qué significa esto para el futuro de la banda, puede que una vez más están adelantados a sus contemporáneos y muchos ni enterados.

5. LA LÁ – LA FELICIDAD

Considero “Zamba Puta” un suceso en aquel pequeño círculo que termina siendo la escena musical peruana. Sin ataduras a los géneros populares entre los artistas alternativos La Lá no solo logró lanzar una producción que consolide su carrera, a la par, es una honesta confesión sobre los altibajos de ser mujer: va sobre el vivir en una sociedad machista a su rol como madre e hija. Cada confesión o relato que La Lá canta se apoya de una lírica limpia ajena a sarcasmos e inteligente en sus momentos de humor, la base rítmica que la acompaña a lo largo de las nueve canciones abarca ritmos peruanos, del resto de Latinoamérica y jazz. 

Centrándonos en La Felicidad, mi canción favorita en la carrera de La Lá, encontraremos una energía ligeramente distinta. El apartado compositivo es un vals que crece a paso galopante de cajón peruano e instrumentos de viento, mientras la parte lírica es un emotivo reconocimiento póstumo a su madre. Muchos de los versos más bellos de La Lá los puedo encontrar aquí desde los primeros segundos (mi ejemplo favorito se da en el inicio con aquel “Tú, suceso en la ceniza/  tú me enseñaste la vida/ a partir un monte de cosas/ para alcanzar mi alegría”) siendo cantados con una carga sentimental pocas veces igualada en el resto de la canción. La perfecta manera de cerrar un disco y ciclo. 

6. FABRICIO ROBLES – MIRAFLORES

En los últimos años Perú, o Lima si le echamos la culpa a la centralización, ha visto surgir una generación de jóvenes músicos distinta a las anteriores. Caracterizados por estar en mayor contacto con sus sentimientos en vez de dejarse llevar por emociones, esta generación crea obras de notable carácter empático y delicada composición. Bajo esta premisa, pero con estilos algo distintos entre sí, hallamos las obras de Octavia de Cádiz, El Cuarto de Juegos o la Negra Valencia por poner unos ejemplos.

Miraflores, de Fabricio Robles, es uno de mis ejemplos favoritos al hablar de esto. En su balada folk de aires épicos, el joven compositor nos transporta a una fiesta sin alma en el distrito de Miraflores, conocido en la capital peruana por su privilegio y vida nocturna. Se hace notoria la meticulosidad académica en la composición de esta canción, pasando de la completa desnudez a una majestuosa sección de instrumentos de cuerdas y vientos cerca al final. Quien escuche su más reciente trabajo, Dónde, encontrará varios géneros de música latinoamericana estudiados bajo formato folk pop, pasando por vals criollos, marinera norteña y ritmos afro-brasileros.

7. RENATA FLORES (CON KAYFEX) – TIJERAS

En un país poseedor de una cultura milenaria no debería convertirse en una sorpresa poder encontrar proyectos como el que lleva a cabo Renata Flores, o por lo mínimo no tendría que ser un caso exótico el escuchar rimas en quechua entre cientos de canciones en español. Pero lo es. 

Este año la joven cantante de 17 años ha ayudado a cortar estas brechas gracias a su single Tijeras, donde no solo logra una perfecta unión entre ritmos de moda y letras en lengua autóctona, sino también se encarga de acercar géneros tales como el trap y RnB a terrenos ajenos como podría ser la danza de tijeras (esto gracias a la producción del DJ Kayfex). Una mezcla de pasado y presente que fluye con naturalidad: honrando la tradición, acercándola a una nueva generación y sin quitarle el ojo al futuro. Si esto no es suficiente para estar interesarse en la propuesta de Renata Flores, nótese que lo suyo no va por ser una postura superficial en la música y culturas autóctonas, quien lea la traducción o notas de prensa tras sus singles encontrará una fuerte postura feminista en relación a temas de violencia y machismo. 

En una sociedad repleta de artistas consolidados intentando alejarse del comentario político o social para evitar ser rostro en un debate necesario es grato ver músicos jóvenes comprometidos a ideales. Claro, aparte de también buscar hacer surgir propuestas que, en teoría, podrían ser impopulares en nuestra cultura contemporánea. 

8. SANTA MADERO – PERO FRÁGIL

Hoy en día Santa Madero quizás sea el caso más curioso en la escena musical peruana. Hablamos de un sexteto de muy jóvenes músicos (el promedio de edad en la banda es 18 años) que con solo un single han logrado movilizar a la mayor parte de la prensa musical peruana. Pocas veces hemos visto este tipo de acontecimientos por esta parte del Pacífico.

Y no es para poco, Pero Frágil es una canción que merece todas las loas que hasta el momento ha recibido. Seguidores de proyectos como Buscabulla o el RnB de tintes setenteros podrán encontrar algo llamativo en esta canción de espíritu nocturno y personalidad refinada donde se cruzan el dream pop con las percusiones latinas. Si las siguientes canciones de Santa Madero significan una consolidación de estilo no veo problemas para calificarlo como un proyecto peruano de posible gran prestigio en tierras internacionales, claro, en un mediano o largo plazo. Todo a su tiempo, que el talento ya se ha hecho presente.

@SoyMiroslawa escucha:

9. LOS MIRLOS - LA DANZA DE LOS MIRLOS

Me cuesta creer que alguien no haya escuchado nunca esta canción. Por gusto, por error o por herencia, considero que es un tema cumbre en las fiestas familiares y eventos de protocolo en general. La pongo aquí, porque fue mi primer acercamiento personal a Perú. Recuerdo haber sido muy cercana a una familia que gustaba mucho de la cumbia. En una de sus reuniones, a las que asistí, dado un momento concreto de la noche, el grupo contratado para amenizar la reunión dejó caer el característico inicio y cual llamado de la selva, todos, niños, jóvenes y adultos se levantaron a bailar. Una de ellas me dijo "la canción de la familia" y desde ahí siempre los recuerdo.

Con el paso del tiempo, cuando me acerqué de manera mas formal a la música, me fui dando cuenta de quiénes eran Los Mirlos, los charapas de oro y del peso que marcaba su nombre. Nacidos a finales de los años 60, se han consolidado como una agrupación representativa dentro de la cumbia peruana, reconocimiento que les sirvió para difundirse por el resto del mundo con su gran marca. Es el sello de la latinidad frente a los extranjeros, un símbolo representativo de las caras de su país que se vio compartido con agrupaciones como Juaneco y Su Combo, Los Orientales de Paramonga, Los Invasores del Progreso y muchos más. 

10. MARIA T-TA - LA DESBARRANCADA

Maria T-ta nos hace ubicarnos en  los años 80, cuando la escena de rock subterráneo era completamente liderada y conformada por hombres. En este contexto llega Patricia Roncal. quien joven y extrovertida se impuso a las patadas dentro de este movimiento. Digamos que no fue la mejor cantante que salió del Perú, pero no es por esto que es recordada. Su merecido honorario está enfocado a el sarcasmo de sus líricas, con el que criticaba , de manera irónica, todas las problemáticas que acarreaba su posición dentro de su contexto. También fue líder de tres agrupaciones, que tal parece, no duraron mucho. 

Leyendo me encontré con anécdotas donde gente que trabajo con ella afirma que en un inicio la insultaban, le tiraban objetos en incluso en algún momento los bajaron con ladrillos, pero que aun así la marca de este personaje es imborrable, fue una de las pioneras, que abrió paso para que en un futuro mujeres pudieran incursionar en esta agitada generación de machismos artísticos. Es esta mi canción favorita, una burla al intelectualoide, me hace reír mucho. "pero como no soy una chica común no soy una comunista,como me tiro al Marco soy marxista"

11. NOVALIMA - SANTERO
Sí, latinoamérica está permeada de la tradición indígena, sin embargo, todos reconocemos y apropiamos la descendencia africana en nuestra cultura actual. Novalima, con 15 años de trayectoria se ha impuesto como uno de los grupos pioneros en la música electrónica afro-peruana, a los que le siguieron proyectes como Afroloop o Vitu. Con mezclas de Reggae, Dub, Afrobeat, entre otras, han conjurado a los espíritus del Perú negro y han abarcado muchos escenarios alrededor del mundo, donde han conquistado y encajado perfectamente por la cantidad de influencias que corren por su instrumentación. 

Son una agrupación con un bagaje musical enorme que la convierte en un proceso constante de búsqueda y revitalizacion. Con cada gira realizada, vemos a Novalima regresar con ideas frescas y diferentes que hacen sus trabajos únicos entre sí a pesar de todos apuntar aun mismo concepto general

Considero, que en grupos como este  desemboca la herencia de Chabuca Granda. La música negra ahora se baila en todos los rincones del mundo, se pone en la discoteca, se disfruta. 

12. BANANA CHILD - LA CURA

No sé qué tanta fuerza tenga esta banda dentro de su país o su escena, a mi me parecen espectaculares. Mas allá de mi gusto un poco obsesivo con el surf-rock, puedo ser mas objetiva y decir que los Banana Child tienen en realmente una propuesta muy interesante y fresquita, pese a que están enmarcados bajo el lema retro de la música sesentera.

Siento que en este género tiene unos arquetipos tan remarcados que es complicada la innovación. Ya conocemos los sonidos característicos de las guitarras, al igual que la batería pero ¿qué hay mas allá?  Aunque muy de vez en cuando caen en patrones repetitivos, entre los dos álbumes realizados vemos como el concepto se va consolidando y definiendo, apropiándose de su lengua, de su contexto y tomando colores e imágenes que los hacen definirse dentro de muchas otras agrupaciones. Espero que pronto estén pisando tierras colombianas. 

13. KILL AMIGO - RELAJANTES MUSCULARES
Si tuviese que definir a Kill Amigo en una palabra diría adolescencia. Cada que los escucho, me imagino a mi hermano en los diez y pico montando patineta y escribiendo viva el punk en los muñecos de mi hermana cada que ella estaba desprevenida. Si bien, su sonido está enmarcado en ese retrato del punk rock de los 2000, El Filin Ha Muerto esta lleno de situaciones difíciles que no todos tenemos que enfrentar siendo jóvenes. Depresión, desamor, narcóticos y procesos complicados es lo que nos presentó en 2017 el debut de cuatro chicos que según vi, se han consolidado muy bien en la escena peruana. 

Valdo decía con Ada Y La Nueva Pasión que el llorar en la pista de baila se consolidó como temática moderna para la música, pues, acá lloramos en el centro del pogo. 

14. GOMAS - EL VERANO MURIÓ
Así como Kill Amigo es el reflejo de lo adolescente,  escuchar a Gomas es vivir en loop la infancia. Esta banda me dio uno de los videos más lindos del 2016 y desde entonces cada que la escucho solo pienso en el baile de los niños cuando están felices y en lo libres que se sienten cuando corren. Aun así siendo el reflejo de una edad en la que fuimos felices sin darnos cuenta, no generan una melancolía de lo que ya no está, sino mas bien despierta el niño que a veces se nos duerme. Es un pop contagioso y sonriente con el que invitaría a alguien a dar un paseo.   

No podemos agregar que tengan grandes artilugios instrumentales, pero la música buena no siempre es la complicada y llena de arreglos o extravagancias. Esta banda florece en la belleza de la simplicidad. 

Bajo la mano de seis integrantes, se han convertido en un referente al hablar del indie pop actual de este país, compartiendo conceptos similares con agrupaciones como Golden Cameleon o incluso un poco Dan Dan Dero. 

15. MENORES - PISTOLAS

Poco es mi conocimiento del movimiento del trap y del rap en Perú y en general en latinoamérica, debo confesar. Menores para mi es uno de los pocos acercamientos que he tenido a este género en dicho país y aun así, en mi corto panorama, considero que a nivel latinoamérica tienen un concepto muy particular en su proceso creativo. Hace no más de un mes salió a relucir su última entrega el EP Estados Invisibles y puntualmente me parecen muy llamativas las bases sobre las cuales van lanzando sus líricas. El juego con los elementos electrónicos les brinda una atmósfera que no he escuchado en otros proyectos. 

Junto a esto, también las acompaña un trabajo gráfico que consolida la propuesta melódica que le brindan a los oyentes. Es un trabajo contundente, limpio, muy profesional, compuesto por mujeres que han tenido proyectos parecidos. Definitivamente la unión hace la fuerza.